EDITORIAL

Apreciables lectores: Coincidirán conmigo en cuanto a que el advenimiento de UN NUEVO GOBIERNO ESTATAL es sin duda el principal acontecimiento en estos días, y evidente motivo de esperanza para todos los nayaritas que desde hace muchos años anhelamos que nuestra entidad se desarrolle económicamente y con ello, se convierta en TIERRA DE OPORTUNIDADES para evitar que nuestros hijos sigan viéndose obligados a emigrar hacia otros lugares para subsistir y/o labrarse un buen futuro. Así pues, este 19 de septiembre es muy significativo en virtud de que se da inicio a la posibilidad de cumplimiento del pacto que reciente- mente se estableció entre UN POLÍTICO NAYARITA MADURO, SERIO Y DE AMPLIA EXPERIENCIA EN LA ADMINISTRACIÓN PÚBLICA; y una sociedad que lo hace su gobernante confiando alma adentro en su promesa de que gobernará en congruencia con los postulados de la CUARTA TRANSFORMACIÓN, ROMPERÁ ESQUEMAS ATÁVICOS Y SE ESFORZARÁ POR DESPERTAR AL PODEROSO GIGANTE DORMIDO que por sus riquezas naturales y la valía de sus habitantes es Nayarit. El reto es de grandes dimensiones, y no habrá tiempo para titubeos ni flaquezas durante este próximo sexenio que podría ser EL PARTEAGUAS HISTÓRICO que marcaría el antes y el después que hemos venido esperando. Hay un nuevo liderazgo en nuestra entidad decidido a marcar la diferencia; y una ciudadanía dispuesta a seguirlo con lealtad mientras se mantenga firme rumbo a los propósitos planteados. Para el caso, la eficiencia, la honestidad, los resultados, el compromi- so de servir, y en suma, la lealtad al ambicioso proyecto de “DESPER- TAR A NAYARIT”; deben ser los indicadores fundamentales con que se mida el desempeño de LOS NUEVOS FUNCIONARIOS DE LA ADMINISTRACIÓN “NAVARRISTA”; y única justificación para que permanezcan en el mismo. ¡Demos la bienvenida al nuevo sexenio que inicia! Los saludo cordialmente.

ACTUEMOS A TIEMPO EVITANDO LAMENTARNOS A DESTIEMPO


Por Miguel Angel Navarro Quintero

Momentos verdaderamente difíciles y parecería insoportables, está viviendo un amplio sector de la población y es aquí, donde resulta necesario conservar la claridad, firmeza y una reflexión que se ligue a la acción que como sociedad debemos mantener e incrementar a pesar de la adversidad y del agotamiento, que más allá de lo físico resulta emocional.

No hablemos de estadísticas, cuyos números muchas veces no representan la percepción y el sentimiento real de la gente, mejor preguntémonos y respondamos con apego a la verdad para no caer en una responsabilidad que se traduce en permanente disculpa, ¿NOS ESTAN ENGAÑANDO O NOS ESTAMOS ENGAÑANDO NOSOTROS MISMOS?

Las personas manifiestan y reflejan una gran exigencia y necesidad de empleo mismo que los está agobiando, atentando contra la estabilidad personal y general. La gente tiene miedo por la inseguridad que percibe en todo momento y se siente en riesgo junto a su familia.

Los productores callan por la presión que ejercen, quienes tienen la obligación de apoyarlos, pero la realidad es que viven en la pobreza sin poder vender sus cosechas, estando bajo el asecho de un coyotaje manipulado y perverso.

El patrimonio de muchos se malbarató al encontrase, por un lado, con enormes necesidades sin poder resolver siquiera lo más indispensable y por otro lado, los que en una compra de ganga, les arrebataron con maniobras tramposas y a cantidades risibles, lo que después han revendido en sumas extraordinarias.

Por otro lado, el patrimonio público está en riesgo, los Nayaritas debemos -si, leáse bien- más de 2 mil millones de pesos que pronto serán 3 mil, pagándose por intereses únicamente, entre doscientos y trescientos millones de pesos al año. De la misma manera, fueron derribados sin misericordia la identidad, la historia y el gran recuerdo generacional que representaban nuestros estadios de beisbol y futbol, jamás actuamos para defenderlos entre todos, lo que aumentó la soberbia –seguramente- del gobernante inmaduro.

En Tepic, con recursos federales, s e construyó un bulevar, con enormes sospechas de corrupción, o se pavimentarán -como se dice- las avenidas del parque de la loma, cuando existe un caos vial permanente, pasos a desnivel que no sirven en ningún sentido; con calles destrozadas y con colonias y comunidades como en todo el estado, sin drenaje y sin agua, a lo que se agrega servicios de salud con trabajadores profesionales y/o administrativos que no cuentan con las herramientas para brindar la atención que desean, viéndose atropellados -muchas veces- en sus derechos. En educación pasa lo mismo, resulta urgente apoyar a los maestros y entender la necesidad de una educación de calidad que se otorgue en planteles que reflejen dignidad.

Las campañas ya empezaron, no hay nadie que regule, que meta orden. La inversión económica es altísima en propaganda, estructuras pagadas, apoyos diversos, para los que se requieren grandes cantidades de dinero, además de espectáculos de lucha libre, bandas musicales, jaripeos, peleas de gallos, artistas nacionales para niños y para adultos, campeando en algunos eventos; la cerveza y el vino en abundancia, con el fin de crear la imagen de una felicidad que verdaderamente se encuentra ausente –lamentablemente-.

Hoy más que nunca, nos debemos preguntar ¿De dónde viene tanto dinero? ¿Cuál es su origen? ¿En qué condiciones de riesgo nos están metiendo? ¿Hacia dónde va Nayarit?

Ante estas reflexiones es necesario que cada uno hagamos nuestra tarea con seriedad y formalidad, tratando de unirnos por arriba de las diferencias y a pesar del temor, haciendo a un lado toda dadiva, diversión mal habida o filantropía hipócrita, de quienes aprovechándose de la necesidad, desesperación y pobreza, menosprecian la inteligencia y la dignidad de la gente.

Basta ya! Juntos rescatemos Nayarit.